No tenemos certeza de que Leonardo plasmara su rostro en ninguna de sus obras, ni hiciera ningún autoretrato como si realizaron muchos otros artistas.
Su atribuido autorretrato, ya anciano, parece representar una edad excesiva para los sesenta años aproximados que tendría el artista cuando lo realizó, y parece más propio que se refiriera a su abuelo Antonio da Vinci en opinión de algunos expertos.
Recientemente un óleo sobre tabla de 60 por 40 centímetros procedente de una colección privada, que se creía retrato de Galileo Galilei, se supuso en un principio retrato de Leonardo dada sus similitudes con el "Perfil de Leonardo", óleo sobre panel obra de Cristofano dell´Altissimo , que se conserva en la galería de los Uffizi de Florencia.
Pero los historiadores encargados de su investigación, Nicola Barbatelli y Alessandro Vezzosi, director este último del "Museo Ideale Leonardo da Vinci", apuntan tras un profundo estudio que, aún sin descartar la posibilidad de la autoría, es muy poco probable que se trate de un autorretrato de Leonardo.
Esta ausencia ha dejado libre paso a todo tipo de especulaciones, una de las más "simpáticas", a mi entender, la que mantiene que el rostro de "La Gioconda" sería ¡el propio del gran artista!.
Hacen cierto el viejo refrán: " Si tiene barba San Antón, si no la Purísima Concepción".
Incluso para otros, no pareciéndoles "suficiente" la autoría de la Sábana Santa, tras inventar la fotografía y, digo yo que también una buena "máquina del tiempo", Leonardo habría plasmado su propio rostro en el Hombre de la Sábana.
Todd Fenton y Norman Sauer, dos antropólogos forenses de la Michigan State University, tras comparar las medidas antropométricas del supuesto autorretrato de un Leonardo anciano con la obra citada de Cristofano dell´Altissimo que representa el retrato de un Leonardo joven, concluyen en la identidad de ambos, lo comparan con el rostro del Hombre de la Sábana y ...¡eureka!...es el del mismísimo Leonardo da Vinci.
En todos los rebaños grandes suele haber "ovejas negras".
No hay nada que objetar a la comparación de las medidas antropométricas realizadas por ambos antropólogos, pero si a sus conclusiones porque:
1.- No existe ninguna certeza de que el dibujo del anciano realizado por Leonardo sea su autorretrato.
2.-Cristofano dell´Altissimo nació en 1525 y Leonardo falleció en 1519, por lo que el "Perfil de Leonardo" de aquel magnífico pintor, representando a un Leonardo joven, tiene altísimas probabilidades de estar alejado de la realidad.
[Fenton y Sauer ni siquiera utilizan la obra original del Cristofano, sino un grabado, bueno, de autor desconocido y que ilustra la obra "The Hundred Greatest Men". New York, D.Appleton Company, 1855, grabado basado en el óleo de aquél artista.]
3.- Se añade a todo lo anterior el desatino de compararlo con el rostro del Hombre de la Sábana, de presencia indubitada en 1355.
De manera que lo único que han demostrado con su trabajo Fenton y Sauer, y de ahí que yo halla traído el tema a colación, es que las tres representaciones comparadas por estos antropólogos forenses se ajustan a los parámetros anatómicos correctos, preconizados por el canon clásico griego y redescubiertos por el canon clásico renacentista, utilizado tanto por Leonardo da Vinci como por Cristofano dell´Altissimo, y coincidentes con la anatomía correcta del Hombre de la Sábana.